¿Qué se hace para concienciar a los jóvenes? ¿Qué diferencia la legislación sueca y española? Estas son algunas de las cuestiones abordadas esta mañana en el seminario 'Concienciación y legislación sobre la compra de servicios sexuales', organizado por la embajada sueca.
Han participado expertos de la Delegación del Gobierno para la violencia de género, fiscalía, policía y asociaciones.
Tras la bienvenida del embajador de Suecia, Lars-Hjalmar Wide, la ministra de Menores, Mayores e Igualdad, Åsa Regnér, ha detallado cómo entiende el país nórdico la compra de servicios sexuales. "Vemos la prostitución como un tipo de explotación y de violencia hacia las mujeres. No es un negocio entre dos partes que se encuentran al mismo nivel, sino que una tiene más dinero, poder y estatus que la otra", ha destacado.
Suecia tiene un Gobierno feminista, como declaró su primer ministro en 2014, y “ha avanzado mucho en igualdad, pero todavía tenemos muchos desafíos que afrontar, sobre todo en lo que se refiere a la situación económica de las mujeres y a la violencia de género. No existe el paraíso", ha reconocido Regnér.
En 1999, Suecia introdujo su ley de prohibición de compra de servicios sexuales, la primera de su género. Ilegaliza la compra de servicios sexuales, junto con el proxenetismo, que ya estaba prohibido, sin castigar a la prostituta. Es decir, se condena solo al comprador. Las mujeres pueden acceder a servicios sanitarios y denunciar abusos o violaciones.
Este enfoque ya sido adoptado por países como Noruega, Irlanda del Norte, Canadá y Islandia. "Francia acaba de sumarse -avanzó la ministra- y Grecia está trabajando en este modelo".
El resultado, según Regnér, ha sido satisfactorio: "La ley ha frenado la actividad de la Trata. Las mafias ven un obstáculo y saben que es más complicado ejercer aquí". "No vemos la prostitución como una profesión y no aceptamos el concepto de trabajadora del sexo", añade.
Lo más importante, a su juicio, es frenar la demanda. La máxima es sencilla: sin clientes no hay negocio.
A continuación, Dolores Moreno, directora de la Mujer de la Comunidad de Madrid, ha explicado la Estrategia madrileña contra la trata de seres humanos con fines de explotación sexual 2016-2021, una iniciativa que contempla la creación de un centro de acogida para menores de entre 12 y 17 años y programas de educación afectivo sexual dirigidos a adolescentes. Su presupuesto: 7 millones de euros.
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Entre otros derechos, las víctimas reciben asistencia jurídica y sanitaria gratuitas y se les pone en contacto con una entidad experimentada en víctimas de Trata. La Comunidad de Madrid ya ha atendido a mujeres de 17 nacionalidades, la mayoría del África subsahariana, América Latina, Europa del Este y Asia. El año pasado también hubo dos casos de mujeres españolas. El 26% de las víctimas tenía estudios medios o superiores.
Más allá de su lugar de origen, comparten el haber sido vendidas por familiares o engañadas con falsas ofertas de trabajo. Las que llegan a Madrid son alojadas en pisos o locales y controladas permanentemente por organizaciones. Contraen una deuda que no deja de crecer y son agredidas y amenazadas. Incluso sus familiares. "En algunos casos, desgraciadamente, las amenazas se han llevado a cabo", reconoció Moreno.
Madrid cuenta con una campaña de sensibilización dirigida a visibilizar la existencia de víctimas entre los demandantes de servicios sexuales.
Moderada por la periodista María R. Sahuquillo, de El País, en esta mesa han intervenido Shahab Ahmadian, de la ONG Hombres por la Igualdad de Suecia; la cineasta Mabel Lozano, que realiza campañas y documentales de sensibilización; José Nieto, inspector jefe de la Policía-UCRIF; y María José Ordóñez Carbajal, delegada del Gobierno para la violencia de género.
Ordóñez ha comenzado recordando a las 16 mujeres asesinadas a causa de la violencia machista en lo que llevamos de año y a sus hijos, que han quedado huérfanos. La delegada del Gobierno ha detallado después las políticas públicas de lucha contra la Trata de personas con fines de explotación sexual y ha destacado campañas como #contralatratademujeres TOMA CONCIENCIA, #sinclientesnohaytrata o los cinco millones de posavasos repartidos hace dos año para luchar contra esta forma de esclavitud.
"Hace una década ni se hablaba de esta cuestión", ha señalado Ordóñez.
Quien se encarga de hablar sobre ello y denunciarlo en Suecia es Shahab Ahmadian, de Hombres por la Igualdad y experto en masculinidad y violencia sexual.
"Cuando se compra sexo no hay consentimiento y, si no hay consentimiento, es una violación", ha denunciado tajante. Shahab cree que muchos hombres se vuelven feministas cuando tienen una niña porque entienden que la mirarán como ellos miran a otras mujeres.
A su juicio, "no es suficiente con ser un hombre feminista pasivo", ha llegado el momento de convertirse en "aliados activos". Cada día se registran, añadió, 100 casos de violencia sexual en Suecia, lo que suponen unos 36.000 al año. En el 75% de los casos víctima y agresor se conocen.
Ahmadian apuesta por cambiar el enfoque y, en lugar de decir "una mujer fue violada..." afirmar "una hombre violó a una mujer". Es él quien debe hacer cambiar, señaló. Su organización aboga por un cambio positivo en el que los hombres sean responsables de sus acciones y dejen de culpar a los demás. En Suecia ya han realizado numerosas campañas con rostros conocidos masculinos, canciones o podcasts para que "los hombres hablen con otros hombres sobre violencia sexual". "Queremos que formen parte de este movimiento del cambio", concluyó.
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El público objetivo de Mabel Lozano, directora de cine, son los jóvenes.
Hace 12 años, en España, nadie hablaba de la Trata. Lozano la descubrió a través de una víctima y, desde entonces, ha dedicado todos sus esfuerzos en combatirla con una mirada distinta, la del cine. Su primer documental, reconoce, "no lo vio nadie". Ahora, afortunadamente, la sociedad está más concienciada, pero no es suficiente.
"No quiero vivir en un mundo donde cada día son compradas mujeres como si fueran mercancía, ganado. Es un delito gravísimo, es esclavitud, y lo estamos amparando", denunció. No se puede decir más claro. La Trata, insistió, "no se palía, se erradica".
Con un cine donde apenas un 17% es realizado por mujeres, es evidente que falta nuestra perspectiva. "Somos la mirada ausente", puntualiza Mabel, cuya máxima preocupación son los adolescentes, los futuros demandantes de sexo de pago. "¿Cómo estamos educando a nuestros jóvenes? Nadie les ha contado lo que hay detrás del negocio de la prostitución. Ven en televisión a personajes conocidos hablando de ello con total normalidad y lo asumen", señala la directora.
Sus documentales y las charlas que imparte en centros escolares españoles persiguen el objetivo de informar y sensibilizar para que sepan qué es la Trata y dónde está: en las rotondas, en las calles, en los polígonos... Forma parte del paisaje de cualquier ciudad, "aunque la gente no lo vea", como afirma José Nieto, inspector jefe de la Policía.
"Es difícil que la sociedad perciba que se encuentra ante víctimas", aclara, porque ven la sonrisa de las mujeres y niñas y les cuesta entender que se trata de una falsa sonrisa:"Están obligadas a sonreír".
El inspector jefe, que lleva trabajando en este campo casi 20 años, es muy claro: "se trata de un delito de crimen organizado". Desde que en abril de 2013 se habilitara un teléfono y correo electrónico para que cualquier ciudadano pudiera denunciar, ya han sido más de 4.000 las llamadas y mails recibidas.
En España, la gente empezó a abrir los ojos cuando la Policía Nacional desarticuló en Murcia un grupo que captaba menores de edad en Facebook para después explotarlas sexualmente. Los agentes identificaron a 29 víctimas en dos clubes de alterne de Murcia y Santomera.
En esta mesa han intervenido Soraya Vega, responsable de Igualdad de la Gestora del PSOE; Per Englund, inspector de Policía en Suecia; y Joaquín Sánchez-Covisa, Fiscal de Sala, coordinador de Extranjería de la Fiscalía General del Estado. A su juicio, "en España hay Trata porque el proxenetismo no está perseguido".
Para la Fiscalía, esta lucha es un asunto prioritario desde hace 10 años. Un total de 115 fiscales se encargar de perseguir esta forma de esclavitud.
El artículo 177 bis, recordó Sánchez-Covisa, establece que:
1. Será castigado con la pena de cinco a ocho años de prisión como reo de trata de seres humanos el que, sea en territorio español, sea desde España, en tránsito o con destino a ella, empleando violencia, intimidación o engaño, o abusando de una situación de superioridad o de necesidad o de vulnerabilidad de la víctima nacional o extranjera, o mediante la entrega o recepción de pagos o beneficios para lograr el consentimiento de la persona que poseyera el control sobre la víctima, la captare, transportare, trasladare, acogiere, o recibiere, incluido el intercambio o transferencia de control sobre esas personas.
"Los rufianes o chulos del Quijote son ahora empresarios del sexo", añadió el Fiscal de Sala.
Según las más de 30.000 notas informativas de Policía Nacional y Guardia Civil, estamos ante un delito que afecta sobre todo a mujeres (96%),;víctimas de Trata y prostitución que a menudo sufren torturas y violaciones.
Han detectado, además, un incremento de la explotación de menores de edad y personas con discapacidad. "El origen está en que el cliente exige cada vez más aberraciones", denunció Sánchez-Covisa.
Mario Garcés, secretario de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, ha clausurado este interesante seminario y recordado que estamos ante un problema internacional que "nos obliga a colaborar". Ante la feminización de la pobreza, ha destacado, debemos buscar las causas en los países de origen mediante la adecuada cooperación internacional y persecución del delito transfronterizo.
En el siglo XXI, ha añadido, "aún se utiliza a mujeres y niñas como mercancía. Es la manifestación más miserable del comportamiento humano".
Los planes del Gobierno pasan por apoyar a las víctimas y garantizar sus derechos, al tiempo que sensibilizar a la sociedad y promover un mayor conocimiento de estas situaciones de explotación y esclavitud.
Al secretario de Estado de Servicios Sociales e Igualdad le preocupan especialmente las pautas de conducta de los más jóvenes: "Hay que incidir en la concienciación social para que reconozcan que determinadas conductas son violencia de género, dominación. El amor es otra cosa; es respeto".
Enhorabuena a la Embajada de Suecia por la organización del seminario.
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