El grupo de Violencia de Género del Colegio de Psicólogos de Madrid invitó a Mujeres en Igualdad a la presentación del proyecto que una agencia de seguridad canina, Security Dogs, realiza como responsabilidad social.
Desde hace cuatro años, y de manera gratuita, adiestran a perros para la seguridad, protección y acompañamiento, las 24 horas del día, de mujeres maltratadas con una orden de protección.
Para acceder a este proyecto, las usuarias deben realizar dos cursos, uno de 20 horas y otro de 250 horas de adiestramiento.
Ángel Mariscal, campeón del Mundo de Mondioring y responsable del proyecto, explica que con el perro hay que trabajar el instinto de protección de la mujer, no la mordida. De hecho, su uniforme de trabajo es un bozal y un arnés que siempre deben llevar en la calle. No son perros peligrosos ni violentos; son perros dóciles, familiares, cariñosos. Su instinto "es la protección".
Se trata, sobre todo, de pastores alemanes, ya que son corpulentos, dóciles y buenos, y pastores belga malinois. Son animales que, durante el primer año de vida, viven con familias para que desarrollen relaciones afectivas y estén en contacto con niños y con otros animales.
Si la usuaria ya tiene perro, y éste cumple los requisitos, como que sea "un perro grande y con carácter templado", también puede ser adiestrado para su protección.
"El perro nunca sufre"
A las usuarias del programa se las enseña a dirigir al perro cuando se sientan en peligro. Únicamente lo activan ante su agresor. ¿Cómo? Mediante un simple gesto sobre el arnés del perro. El perro nunca sufre, ni en el proceso de adiestramiento ni si tiene que proteger a su dueña. Su victoria es la retirada de la situación conflictiva, nunca la mordida, al igual que ocurre con los perros de los vigilantes de seguridad.
Dos usuarias del proyecto acompañaron a Ángel durante la presentación. Ambas relataron su historia de maltrato, cómo conocieron el proyecto, la relación que establecen con su perro y lo que les aporta. Además de seguridad, el animal les proporciona "confianza y una mejora de su autoestima y sus relaciones personales". A esto se suma, no hay que olvidarlo, el cariño que todo perro brinda a sus amos.
Ángel Mariscal elige el perro que mejor relación establecerá con cada mujer y, más tarde, efectúa un seguimiento permanente, ya que cada semana siguen formando al perro.
Este compañero canino las acompaña en cualquier desplazamiento, ya sea para trabajar, comprar, ir al médico... A veces se encuentran con impedimentos, lo que les ha llevado a presentar el proyecto a diversos ayuntamientos para que igualen el acceso de estos perros al de los perros guía de los invidentes.
Las usuarias, además, deben llevar siempre encima una copia de la orden de protección y el carné de vigilante canino.