LAOPINIONDEZAMORA.ES-06/11/2010-S.R.
El objetivo es asentar población al fomentar las iniciativas de empleo
Una lavandería, un salón recreativo, una empresa de tiempo libre o un cose-todo son algunas de las iniciativas en las que han pensado las doce mujeres que participan en Morales del Vino del curso que bajo el epígrafe de «Mujer emprendedora en el mundo rural» se desarrolla todos los miércoles de Noviembre en el pueblo, en horario de tarde. «Están muy motivadas y la verdad es que tienen ideas muy buenas. Lo importante sería que cuajaran, se arriesgaran y pudieran crear su propia empresa». Es Paula Ranilla la encargada de ofrecer información a estas mujeres que van conociendo a lo largo de las 25 horas que dura la enseñanza impartida por la Confederación de Mujeres en Igualdad y promovida por el Ministerio de Asuntos Sociales.
La idea no es otra que intentar asentar población fomentando iniciativas de empleo a través de sociedades limitadas o del autoempleo «porque la idea de cooperativa vemos que no acaba de dar buen resultado en la provincia», explica Ranilla.
Las mujeres de Morales tienen ocasión durante estos días de conocer de primera mano las posibles ayudas con las que cuentan tanto por parte de las administraciones regional y provincial con su línea de subvenciones, así como las líneas de crédito que oferten los bancos. «Las subvenciones se suelen otorgar una vez que la empresa está en marcha, con lo cual el riesgo lo asume el propio emprendedor, pero las ayudas sí que suelen ser rápidas».
Morales del Vino es uno de los pueblos donde sí se han asentado pequeñas industrias por ser un municipio que cuenta con más de dos mil habitantes, cuestión ésta importante para la motivación de nuevos emprendedores. Y como consejo la responsable del curso cree que es muy importante acudir a la Ventanilla Única, ya que a través de este servicio se puede promover gratuitamente el plan de empresa.