“Ahora que la situación económica y el empleo van mejorando, es el momento de que nadie se quede en la cuneta. Debemos dar una oportunidad a todo el mundo”.
Así de rotundo se ha mostrado esta mañana Javier Maroto, vicesecretario de Sectorial del PP, tras reunirse con la Fundación Padre Garralda- Horizontes Abiertos, una ONG que trabaja en España desde hace más de 35 años por la integración social de las personas más necesitadas y en riesgo de exclusión.
"La cohesión social que defendemos apuesta por las oportunidades, no por la caridad. Trabajamos en la inclusión de personas con dificultades. Pongamos cara a estas personas", ha señalado Maroto, quien ha recorrido las instalaciones del Centro Residencial de apoyo al tratamiento ambulatorio –proporciona atención a personas en fase de deshabituación de la drogodependencia- junto a Carmen Fúnez, secretaria general de Mujeres en Igualdad.
Durante la visita han tenido la oportunidad de escuchar, charlar e, incluso, desayunar con buena parte de las 100 personas que residen en esta sede.
“Somos como una familia, nos queremos mucho”, subrayaban los usuarios del centro. Mientras, el padre jesuita Jaime Garralda, fundador de este proyecto, asentía, bromeaba y compartía confidencias con algunos de ellos. Como en una auténtica familia.
"¿Qué es ser un marginado?", se preguntaba el padre Garralda. "Alguien que ha pasado hambre, frío, dificultades, pero, sobre todo, desprecio".
Una de las veteranas lo corroboraba. Tras engancharse a las drogas con apenas 14 años, pasó 12 años en la calle y otros seis en prisión. “Cuando estaba en la calle la gente se apartaba y nadie me miraba a los ojos”, recuerda. Esta es una de las cuestiones sobre las que más incide el padre Garralda: la indiferencia de la sociedad ante los que están a nuestro lado pero a veces ni vemos.
Para Garralda, de 94 años, "la drogadicción es una enfermedad con derecho a tratamiento médico que se supera con esfuerzo y cariño. Hay una terapia muy eficaz para combatirla: el amor”.
Su objetivo es transmitir a la sociedad el mensaje de que sí se puede superar la drogadicción. Después, “una vez que logras salir, hay que recuperar tantísimas cosas perdidas… como la familia y los amigos”, añadía otra de las usuarias. En algunos casos la familia les ha dejado de lado, pero en muchos otros han recuperado el afecto de sus padres, hermanos e hijos.
"Las personas son lo primero. No es una opción, es una obligación"
“Recuperar a las personas marginadas no es una opción, es una obligación ética y social”, ha subrayado Maroto. El dirigente nacional ha recordado que para el Partido Popular “las personas son lo primero”, es el lema de la Ruta Social, y “las personas que van primero son las que están en riesgo de exclusión o que sufren la marginación”.
El objetivo de la Ruta Social es "tomar el pulso" de la realidad y presentar propuestas electorales que tengan "ojos" y "sentimientos".
"Se puede hacer un programa electoral en un despacho y, seguramente, será muy bueno, pero a nosotros nos gusta hacerlo a pie de calle, en el barro, en las situaciones más complicadas", ha concluido Maroto.
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