Túnez concede la igualdad de derechos entre hombre y mujer

Túnez aprobó ayer la igualdad ante la ley, “sin discriminación alguna”, entre hombre y mujer, en el texto de la nueva Constitución que debe regir el país tras la caída de la dictadura en enero de 2011. La fórmula es fruto de un acuerdo entre el partido islamista Enahda, que cuenta con mayoría en la Asamblea legislativa, y la oposición laica.
 
Pese a la ola de revueltas liberales, conocida como Primavera Árabe, iniciada precisamente en Túnez, la formulación constitucional de la igualdad de sexos es una decisión inédita en el mundo árabe, que sigue privilegiando al hombre sobre la mujer tanto en la legislación como, sobre todo, en la práctica.
 
Enahda, vencedor de las elecciones legislativas en Túnez, produjo una nueva revuelta interna en el país cuando hace año y medio abogó por consagrar en la nueva Constitución el concepto de “complementariedad” en sustitución del de “igualdad” de ambos sexos ante la ley. El clima de inestabilidad política y la fuerza de la tradición igualitaria de Túnez -quizá el país árabe más cercano a Europa en materia social y cultural- facilitaron la retirada de la propuesta islamista.
 
Pese a que el acuerdo final ha tranquilizado a los partidos laicos y a los movimientos de mujeres tunecinas, el varón sigue teniendo en Túnez algunos privilegios, en particular en materia de herencia. La ley islámica -Sharía- establece que a la mujer le corresponde la mitad que al varón.