El Gobierno español ha expresado, en una Declaración aprobada por el Consejo de Ministros con motivo del Día Mundial de Tolerancia Cero con la Mutilación Genital Femenina (MGF), que se conmemora el 6 de febrero, su rechazo y el de toda la sociedad a esta práctica y ha manifestado su firme compromiso por lograr su erradicación.
Esta Declaración afirma que la ablación se efectúa casi siempre en menores y constituye una violación de los derechos de la niña, y califica la MGF de “acto criminal”.
Mapa de la Mutilación Genital Femenina
Cataluña concentra el 36,6% del total de estas jóvenes menores de 15 años, con más de 6.000 chicas, unas 2.000 más que en 2008. El municipio español con más mujeres menores procedentes de países donde se practica la Mutilación Genital Femenina (MGF) es Zaragoza, con 818 en riesgo de padecerla.
En la Comunidad de Madrid residen unas 2.000 jóvenes, en Andalucía y la Comunidad Valenciana, 1.500, y en Aragón, Canarias, Baleares y País Vasco están empadronadas alrededor del millar.
Estos datos forman parte del Mapa de la MGF en España 2012 dado dado a conocer en Barcelona por la antropóloga Adriana Kaplan, que dirige la Fundación Wassu de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) y trabaja desde hace más de 20 años en la prevención de esta práctica, extendida en numerosos países, principalmente del África subsahariana.
Kaplan considera que disponer de esta información pormenorizada de la población en riesgo de padecer MGF por comunidades autónomas y municipios españoles “permite aproximarnos a la realidad y es esencial para cualquier tipo de planificación para la prevención primaria en salud, trabajo social y educación”.
Se trata, considera, de “explorar el interior de la cifra creciente de inmigración subsahariana”, establecer la procedencia, la edad y la distribución de la población en el territorio español para “orientar el trabajo preventivo dirigido al abandono de la práctica”.
Actualización del mapa
Este informe constituye la cuarta actualización del mapa, con anteriores ediciones en los años 2001, 2005 y 2009, lo que permite la comparación con lo que sucedía en esos momentos y ver la evolución de esta práctica ancestral, extendida en 28 países africanos y que afecta a más de 140 millones de mujeres en todo el mundo debido a la que Kaplan ha denominado “diáspora” africana.
Los médicos de familia, pediatras y ginecólogos de Atención Primaria, “que ya están trabajando con las familias”, son los que deberían ser formados para prevenir que las niñas de familias africanas puedan ser víctimas de la mutilación, ha considerado Kaplan, que ha añadido que “no es una cuestión de crear cosas nuevas, sino de voluntad política”.